Por Juan José Cartas Antonio
Somos muchos los que nos preguntamos, cuando tenemos la desgracia de encontrarnos sobre carretera, con un vehículo conocido como volteo, transportando material pétreo… ¿si cae una grava y rompe el parabrisas de nuestro auto, con quién nos quejarnos?
Y es que, con las obras que se están construyendo aquí y allá, en cualquier momento uno de estos vehículos pesados se aparecerá ante su carro y puede ser motivo del daño que causa el material que se desprende.
Son muchos los cristales que han sido dañados por esta situación. Basta solo una gravilla que se desprenda de la carga o impulsada por otro vehículo, para que el parabrisas se convierta se convierta en una «telaraña» y se tenga que invertir en una nueva.
Hay quienes, por falta de dinero, se ven en la necesidad de moverse con su auto con el cristal estrellado, solo que, si un agente de tránsito o policía de caminos federal se aparece en su ruta, puede sufrir la consecuencia de una infracción.
Cierto es que las autoridades han tomado la medida de ordenar que todos los volteos que circulan con material pétreo, utilicen una lona que propicie seguridad a los ciudadanos, para evitar accidentes que pongan en riesgo la propiedad ajena.
Lamentablemente la actitud de muchos chóferes al volante de una de estas unidades peligrosas, hacen caso omiso a las indicaciones moviendo sus unidades, no solo descubiertas, sino a velocidades y áreas no permitidas.
Pero bueno, la pregunta es «a quién recurrir para presentar una demanda», evitando con ello un altercado o disgustos después del suceso. Es necesario y justo que las autoridades pongan orden, para evitar males mayores.
¿Es usted uno de los afectados? ¿su parabrisas fue estrellado, no sólo por el material que derraman los VOLTEOS, sino también por alguna gravilla que dejan en las carreteras los que las REPARAN?
Ojalá saquen la cabeza los propietarios o dirigentes de los sindicatos del transporte de material pétreo, para poner orden a la situación. O bueno, ¿dónde están las autoridades para aplicar el reglamento de tránsito en la ciudad o los federales en las carreteras?.