Comunicado
Oaxaca de Juárez.- El lavado de manos frecuente con agua y jabón es una medida de higiene efectiva para evitar enfermedades diarreicas, ya que se eliminan microbios, virus, bacterias y hongos, informaron los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO).
De ahí la importancia que después de llegar del trabajo, escuela o de la calle, antes de preparar alimentos y de consumirlos, después de tocar la comida cruda, así como después de ir al baño y de cambiar pañales se deben aplicar las medidas preventivas de limpieza.
La dependencia informó que hasta la semana epidemiológica número 46, en la entidad se notificaron 169 mil 619 casos de Enfermedad Infecciosa Intestinal, ubicándose en el octavo lugar a nivel nacional, mientras que las entidades con los primeros lugares son el Estado de México y Ciudad de México.
Por Jurisdicción Sanitaria, Valles Centrales registra 73 mil 513 casos, seguido del Istmo con 35 mil 178, la Mixteca con 23 mil 154, la Costa con 17 mil 666, la Sierra con 10 mil 183 y Tuxtepec con nueve mil 925.
Los SSO recomiendan usar agua purificada, hervida o clorada, lavar y tallar con agua y jabón las verduras y frutas, aquellas que no se puedan tallar deberán lavarse con agua clorada (agregar dos gotas de cloro por cada litro de agua), dejarlas reposar 30 minutos y escurrir sin enjuagar o bien desinfectarlas con plata coloidal.
Utilizar cuchillos diferentes para alimentos crudos y cocidos, lavar, cocer o freír muy bien los productos cárnicos, sobre todo pescados y mariscos.
No dejar alimentos cocidos a temperatura ambiente por más de dos horas, evitar comestibles después de su fecha de caducidad, limpiar los productos enlatados o que estén en frascos de vidrio antes de abrirlos y consumirlos, mantenerlos tapados y en refrigeración.
La dependencia indicó que la diarrea suele ser un síntoma de infección del tracto digestivo ocasionada por virus, bacterias o parásitos que se adquieren al consumir agua o alimentos contaminados, o bien, de una persona a otra por una higiene inadecuada.
La población menor de edad, personas adultas mayores y pacientes con otras patologías son quienes registran mayor probabilidad de deshidratarse al padecer enfermedad diarreica.
Los síntomas de deshidratación son: boca reseca, letargo, ausencia de lágrimas, ojos hundidos, ausencia o disminución de la orina.
Por lo que ante cualquier síntoma es importante acudir de manera inmediata a la unidad de salud más cercana para su atención.