Comunicado
Oaxaca de Juárez.- En el marco del Día Mundial del Paludismo en las Américas, que se conmemora este 6 de noviembre, Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), redoblan esfuerzos para que el Sector Salud garantice el diagnóstico y tratamiento oportuno de esta enfermedad, también conocida como malaria.
Al corte de la semana epidemiológica número 43, en Oaxaca se tiene el registro de 116 casos de este padecimiento causado por el parásito Plasmodium, que se transmite a través de la picadura de mosquitos infectados del género “anopheles”, de los cuales 108 son importados, seis foráneos y dos autóctonos.
Del total de casos, 89 se notificaron en la Jurisdicción Sanitaria del Istmo, 14 en Valles Centrales, 10 en la Costa, tres en la Mixteca; Tuxtepec y Sierra cero casos respectivamente.
De acuerdo con la procedencia de los casos, 97 corresponden a personas migrantes procedentes de Venezuela, nueve de Colombia, cinco de Ecuador, así como dos de México y uno de Nicaragua, Perú y República Dominicana respectivamente. Por género, 87 son hombres y 29 mujeres.
Bajo el lema: “Expandir el acceso al diagnóstico y tratamiento de la malaria sin barreras”, establecido por la Organización Panamericana de la Salud (OPS), en la entidad se refuerzan las acciones para la prevención y control de la enfermedad, mediante la vigilancia epidemiológica permanente, principalmente en localidades de riesgo.
Aunado a la difusión de recomendaciones y capacitaciones, junto con el trabajo en equipo con las autoridades municipales y la participación de la población, a través de la Eliminación y Modificación de Habitats y Criaderos de Anofelinos (EMHCA´S) por el personal de vectores.
Como medidas de prevención desde el ámbito familiar se destaca la instalación de mallas mosquiteras en puertas y ventanas, uso de pabellones, y encalamiento de las viviendas, corte de vegetación peridomiciliaria, que es el sitio de reposo de los vectores adultos, los cuales pican principalmente de noche.
El mosquito se cría en agua dulce de poca profundidad como ríos, lagunas, charcos y diversa vegetación litoral en estanques pantanosos y bordes de los cursos de agua en movimiento.
Cabe destacar que los síntomas de esta enfermedad pueden incluir fiebre, vómito y/o dolor de cabeza, que aparecen de 10 a 15 días después de la picadura del mosquito, por lo que se recomienda acudir a la unidad de salud más cercana y evitar la automedicación.