Editorial El Jaguar Informativo
En las redes sociales se han registrado publicaciones en denuncia a los espacios contaminados en Tehuantepec, desde las calles sucias hasta la creación de basureros clandestinos; pero la pregunta es: ¿De quien es la culpa?.
Si bien sabemos que el parque vehicular con el que cuenta el gobierno municipal para la recolección de basura, es insuficiente para organizar rutas en las más de 50 colonias que existen en el municipio, sin tomar en cuenta a las más de 30 agencias municipales.
Además, tenemos el conocimiento de que el personal del área de limpia pública del ayuntamiento, se queda corto en relación a las demandas de ciudadanos que esperan “todo” de las autoridades.
La población reporta desde calles contaminadas, hasta espacios con montículos de basura que se han vuelto basureros clandestinos; sin embargo, la mayoría de los reportes emitidos a la autoridad, la problemática está situado sobre la misma calle en donde habitan los denunciantes, quienes optan por esperar una respuesta favorable del área correspondiente.
En muchos de los casos, los ciudadanos que más exigen la puntual atención de los servicios públicos de limpia, son quienes no manifiestan una cultura de respeto y educación, criticando los efectos de la naturaleza y las acciones inconscientes del hombre.
Entendemos que son los propios vecinos de las colonias quienes realizan la contaminación local, convirtiendo a las esquinas de las calles en un depósito de basura, cacharro y maleza.
Los comerciantes de productos comestibles, es un grupo de empresarios que más desechos provoca, ocasionando también efectos mayúsculos como el colapso del drenaje, mismo que puede perjudicar a propios y extraños.
Lo que la población tiene que empezar a inculcarse, es la educación al medio ambiente, evitando arrojar desechos en la vía pública y, los depositen en los espacios y lugares asignados para la basura.
Además, el hombre se debe acostumbrar a vivir en un entorno agradable y libre de contaminación, por lo que tiene que construir sus planes para mantener limpio sus espacios.
En tanto a la autoridad municipal, debe de emprender aun más las actividades o campañas de cuidado al medio ambiente, concientizando a la población a la educación ambiental. También, debe proyectar gestiones para adquirir material, instrumentos o vehículos que faciliten los trabajos de limpia pública.